martes, 12 de enero de 2021

Borrasca Filomena y el arbolado urbano

 

Debido a los estragos que ha causado la borrasca Filomena en el arbolado urbano, una serie de colectivos (incluyendo EeuP) nos hemos reunido para solicitar que se trate el tema de manera profesional y respetuosa.

Hay una petición para firmar  👉🏽 PINCHA AQUÍ
y un formulario de adhesiones para particulares y colectivos 👉🏽 PINCHA AQUÍ

Muchas gracias por apoyar y difundir
 
COMUNICADO:
 
BORRASCA FILOMENA Y ARBOLADO URBANO

La nevada inusual que ha tenido Madrid ha provocado la rotura y vuelco de cientos de árboles.

El calentamiento global tiene como consecuencia fenómenos meteorológicos
cada vez más intensos y frecuentes, no sólo sequías y olas de calor (2020 ha sido
el año más cálido que se conoce) sino también borrascas extremas como esta.

1.Los árboles aportan unos beneficios ecosistémicos fundamentales para
nuestras ciudades: absorben el CO2 que generamos y adsorben otros
compuestos nocivos para nuestra salud, aportándonos el oxígeno que
necesitamos. Suavizan las temperaturas tanto en verano como en invierno,
frenan la escorrentía y nos ayudan a aprovechar el agua, son el hogar de la
fauna que habita en las ciudades...y un sin fin de beneficios de los que nos
aprovechamos aunque no seamos siquiera conscientes de ellos.
Los árboles, pues, son imprescindibles en nuestras vidas y nuestras ciudades.

Por todo lo anteriormente expuesto y ante lo vivido este fin de semana en
Madrid, transmitimos tanto a la ciudadanía como a la Administración:

2.Los árboles no están preparados para eventos extremos, más cuando están
debilitados por años de maltrato. Sistemas radiculares débiles, podas
irracionales y malas plantaciones no ayudan a su fortaleza y estabilidad.
3.La Administración pública competente es responsable de que los trabajos de
recuperación se hagan de forma profesional y correcta. Esto incluye tanto la
retirada de árboles caídos, las podas que haya que ejecutar, como en la
posterior planificación y plantación de los que habrá que reponer.

4.Es posible que en grandes parques urbanos y zonas forestales periurbanas no
se retire totalmente el árbol dañado. Hay que atender de manera profesional
cada caso y sus particularidades, muchos se podrán recuperar y aquellos que no
sea así, podrán servir de nichos ecológicos como refugios, por ejemplo, para
aves. De esta manera, se siguen y completan los ciclos y dinámicas naturales.

5.Es preciso que preparemos nuestros árboles urbanos para un cambio
climático que ya se está produciendo. Bien plantando una especie arbórea o
bien una arbustiva, adecuando el programa genético de cada especie a las
características concretas del entorno donde se va a desarrollar. Estas nuevas
plantaciones deben ser diversas y evitar las alineaciones monoespecíficas.

6.Han de destinarse más recursos a la gestión y mantenimiento de la vegetación
urbana: más personal, más medios y más formación.

7.Es imprescindible fomentar la educación ambiental y el conocimiento de la
cultura del árbol entre la ciudadanía.

#ÁrbolesNecesarios

Asociaciones que firman este comunicado:
TREPA, BIOTOPNATURA, ECOLOGISTAS EN ACCIÓN, ESTA ES UNA PLAZA, MESA DEL ÁRBOL DE CARABANCHEL, ARBA, ARRIBA LAS RAMAS.