Desde cerca se observa el desolador estado en que ha quedado Estaesunaplaza tras el paso de la máquina infernal.
No han tenido reparo en destrozar el huerto, tirar abajo los árboles plantados por los vecinos, destrozar el teatrillo, la caseta de trueque, la pista de petanca, las hamacas, el campo de futbol con sus porterías, dejando todo apilado en insignificantes montones sin vida, donde también han quedado depositadas ilusiones, esfuerzo, desayunos y magníficos ejemplos de convivencia...
Desde las alturas, el panorama no mejora mucho...
Seguiremos informando y documentando... que esto no puede quedar así...