Ahora mismo, mientras escribimos estas líneas, un tractor se está pasando alegremente sobre las voluntades hechas realidad en la plaza.
Ha arrasado el huerto, la petanca y demás esfuerzos de gente que, altruistamente ha puesto su dedicación y cariño en un proyecto que se imagina de y para todos.
No han tenido reparos en destrozar el huerto y cargarse los árboles plantados por los vecinos, no nos han dado ni la oportunidad de transplantarlos, están trabajando a puerta cerrada para que no podamos ser testigos de su actuación premeditada y cruel.
El ayuntamiento o la policía o la Comunidad o, todos nos quieren hablar y discutir del proyecto de Estaesunaplaza, pero después, con alevosía, un primaveral jueves, ponen, disponen y sobretodo imponen toda su autoridad y presupuesto, llevándose por delante, lo que no es más que la mera y simple expresión de voluntades ciudadanas.
Nos pueden joder el huerto, nos pueden joder la vida, pero no pueden cambiar lo que creemos, no pueden impedir que tengamos razón.
Ha arrasado el huerto, la petanca y demás esfuerzos de gente que, altruistamente ha puesto su dedicación y cariño en un proyecto que se imagina de y para todos.
No han tenido reparos en destrozar el huerto y cargarse los árboles plantados por los vecinos, no nos han dado ni la oportunidad de transplantarlos, están trabajando a puerta cerrada para que no podamos ser testigos de su actuación premeditada y cruel.
El ayuntamiento o la policía o la Comunidad o, todos nos quieren hablar y discutir del proyecto de Estaesunaplaza, pero después, con alevosía, un primaveral jueves, ponen, disponen y sobretodo imponen toda su autoridad y presupuesto, llevándose por delante, lo que no es más que la mera y simple expresión de voluntades ciudadanas.
Nos pueden joder el huerto, nos pueden joder la vida, pero no pueden cambiar lo que creemos, no pueden impedir que tengamos razón.
¿Madrid, la suma de todos o Fahrenheit 451?
Próximamente publicaremos fotos de la masacre...