Ayer una placera estuvo en la presentación de la convocatoria de proyectos #MadridEscucha de Medialab-Prado para contar la experiencia de la plaza con la administración cuando tuvimos que negociar la renovación de la cesión o pedir ayuda para reparar el muro que se caía o que nos podasen las ramas de los olmos que amenazaban con caerse a la calle.
Estuvo genial, en plan Karate Kid, dar cera y pulir cero, ahora fuerte, ahora flojo, pero dejando siempre un hilo de espernza para que la luz y la poesía llegue a las jerarquizadas áreas del Ayuntamiento de Madrid